El atún es una excelente fuente de proteínas, vitaminas y minerales. Con la ventaja de que es bajo en grasas saturadas, y tiene un alto contenido de Omega 3 (anti-colesterol).

Es rico en vitamina A, muy buena para la vista y la piel, ayuda al desarrollo de los huesos, fortalece el sistema inmunológico, así como vitamina D que previene el raquitismo. También contiene gran cantidad de minerales como el fósforo, el potasio, el sodio, el magnesio y el hierro.

El atún, desde la antigüedad fue muy apreciado en todo el Mediterráneo. Poetas, filósofos y gastrónomos de la antigüedad se ocuparon del atún, Archestrato, Salviani y Apicio se ocuparon de la parte culinaria y dieron consejos y recetas para prepararlo. Hasta sus entrañas eran muy codiciadas para preparar el famoso Garum, la salsa por excelencia del Imperio Romano. Hay, incluso, un vocabulario propio para el atún, "vocabulario tonnaresco". En Japón es muy apreciado pues lo emplean mucho para el sushi y sashimi.

La pesca elaborada se consume principalmente, en España, mientras que otra cantidad se dedica a la exportación al extranjero. Italia es el mayor comprador pues, a pesar de tener almadrabas, no produce lo que necesita para su consumo. Japón es otro gran importador del atún.

Su apreciado sabor y versatilidad en la cocina hacen del atún un pescado muy solicitado, por eso cada día disminuye más las capturas y deben crearse vedad antes de que se extinga. Por esa razón, la cría en piscifactorías del atún rojo del Mediterráneo viene practicándose en España desde hace unos años, en la comunidad de Murcia es donde se concentra casi todo el cultivo de atún rojo que se realiza en la Península.

Sus cualidades gastronómicas hacen de él un manjar y un alimento imprescindible en cualquier cocina. En esta ocasión queremos ofreceros unas recetas donde el atún es imprescindible, como puede ser sushi japonés, el quiche de atún y cebolla o los calabacines rellenos de atún II.